The Dreamers  es un recuerdo, igual que lo puede ser una pieza musical o un súbito rayo de sol. Es un recuerdo acerca de una época en la que toda una generación despertó cierta mañana henchidos de unas esperanzas increíbles. Acaso porque constato que la juventud actual arrastra un aire melancólico con respecto al futuro, he querido recordarles que hubo un tiempo en el que el futuro sólo se entendía positivamente. Bernardo Bertolucci

En “The Dreamers”, el cineasta italiano Bernardo Bertolucci nos entrega dos temas bien marcados, uno de ellos es  la introducción del joven americano en París, su encuentro con los dos hermanos y con la cinemática parisina y las películas clásicas junto al movimiento estudiantil que desembocó en un conflicto armado que se llama “La rebelión estudiantil de mayo 1968”.

El segundo acto de la película es plenamente el sexual lleno de intelectualidad, los juegos a los que Matthew es sometido por Isabelle y Theo, así como también los conflictos psicológicos de los personajes. El arte está ligado a la sexualidad y la experimentación en esta película, estos tres cinéfilos se enfrascan en un juego muy sádico donde no hay tabúes ni temores de lo que pueda suceder.

Mathew (Michael Pitt) es un estudiante norteamericano en Paris en1968 que a causa de la manifestación del 14 de Febrero del mismo año en la Cinematheque Française por la clausura de esta y la expulsión de Henri Langlois como su director, conoce a Theo (Louis Garrel) e Isabel (Eva Green), hermanos gemelos, que rápida y calculadamente lo adoptaran como cómplice cinéfilo y sobre todo, mediador sexual. Langlois había sido campeón del cine en todas sus capacidades en la Cinematheque, creando muestras de cine eclécticas y significativas y su involuntaria partida trajo consigo una ferviente protesta popular por parte de la ciudadanía, estudiantes, cinéfilos, críticos de cine y directores jóvenes del Nouvelle Vague como Jean-Luc Godard, Claude Chabrol, Francois Truffaut (Bertolucci estaba en Italia filmando su primer película pero atento a la causa), así como varios otros directores y figuras de la comunidad internacional como Charlie Chaplin.

Los gemelos Theo e Isabelle, siempre han sido muy unidos y si bien aceptan acoger a Matthew con ellos, en un punto la insustancial figura del amor aparece entre este e Isabelle, dejando de lado a Theo. Es allí cuando empiezan los juegos, las peleas, las discusiones siempre a raíz de alguna película de culto que traerá consigo el desencadenamiento de la sexualidad.

Lo sexual e intrépido de esta película también se vive en las calles. Los cuerpos desnudos y el desenfado con el que se muestran durante la película, los cuerpos desnudos, todo es un llamado de atención, sobre lo que en verdad se está viviendo.

El sexo es artístico así como también el medio por el cual se crean vínculos muy poderosos entre los personajes, vínculos que solamente podrían haber entre Matthew e Isabelle, como cuando en la cocina,Theo los presiona a que tengan relaciones sexuales e Isabelle seduce a Matthew y al terminar el acto, podemos apreciar una escena completamente grotesca pero con mucho significado: Matthew manchado en sangre y desconcertado por haber creído que Isabelle ya había tenido relaciones antes y que ya no era una mujer virgen; Isabelle en shock ante lo que acababa de suceder, quizás emocionada pero asustada a la vez y Theo, quien sale enojado de escena por lo que acababa de ocurrir.

Es así como el juego sexual se convierte más en una trampa, los enfrasca en algo que creen que no va a terminar, pero que acaba en el momento donde empieza la revolución y la lucha por sus los ideales de los jóvenes franceses.

Matthew no pasa de ser una infiltrada experiencia y un recuerdo solamente en la memoria de estos gemelos con los cuales se vive una historia que cautivará a todo aquel que se tome el trabajo de ver más allá de los desnudos.